junio 09, 2003

Jueves: Cumpleaños de mi madre, fuimos a comer a un restaurante argentino en la Del Valle, ahí estuvimos todos incluyendo Ana Paula, que constantemente con que moviera una pestaña se robaba la atención y hacía salivar a toda la mesa.

Mi madre desde hace unos meses ha estado con la idea de irse a España y como en semana santa no se fueron mis papás, ha estado amenazando que se va. Le regale unos Euros por su cumpleaños que desataron discusión por que mi papa no puede/quiere ir, se puso medio de hueva. Pero yo comí rico.

Víctor se acaba de comprar un coche nuevo y lo presumió.

Ya en la noche llego mi Tía Irma y mis primos con un pastel (que partieron con un aro en medio), medio platicamos. Fin del jueves. Se me olvido hablarle/escribirle al Tronx.

Viernes: Quedamos en la oficina que el nuevo régimen empieza el 15 de Junio, por lo que todavía tengo una semanita de horario de secundaria. La mañana se fue como si fuera viernes, y justo antes de irme suena el teléfono: Laura Ivonne, por segunda vez en la semana. Ya habíamos quedado de vernos el Domingo, pero habló para catafixiarlo por el viernes. Como arrastrado, bestia y hocicón que soy me ofrecí a recogerla en su trabajo: Tlanepantla, en viernes y por si fuera poco todavía me fui a comer a mi casa para tener un trecho mas grande y mas sabroso de tráfico que recorrer en la tarde. Como según yo tenía tiempo, me aventé una jetita como de una hora antes de irme. Justo a los 50 minutos de mi sueñito, suena el timbre. El puro hecho de que alguien toque el timbre y me despierte es suficiente para que lo odie de aqui al día del juicio final. Era el carpintero.

El carpintero y mi mamá se aventaron unos rounds de algunos meses. En febrero se le encargo un trabajo, que entrego hasta ahora, y mal. Mi madre furica, no ha tenido consideración y lo ha dejado plantado un par de veces con el pago, esperando (con toda razon) que el trabajo quede bien hecho. Luego resulta que el divo del carpintero se ofende por que no le aceptan un trabajo mal hecho y por ende no se le paga. Total, con un poco de música se debe armar una buena aria.

Ahí estaba yo, con mi odio de recién levantado contenido ante un carpintero que no dejaba de quejarse, creo que mi indiferencia hasta lo hizo enojarse mas. Pero en fin, al no estar mi madre dejo a un chalan a arreglar unos detalles y amenazó que si para cuando acabar el chalan, mi madre no llegaba y pagaba, nos iba a caer una maldición a toda la familia y 7 veces 7 generaciones posteriores, donde nunca íbamos a poder conseguir a un carpintero, plomero o albañil decente y cumplidor. Yo no me preocupé, por que estoy seguro que a mi bisabuela ya le echaron esa maldición y no se puede poner peor.

Mentaba yo madres, por que ya era hora de irme arrastrando hasta tlanepantla y no podía irme por este pinche señor y su necedad. Le hable pues a mi madre para que apurara el paso, pero lo que mejor me fue, fue media hora, salí de malas y el tibio y amoroso tráfico de viernes no hizo mas que ponerme mas de malas. Tanto así que le hablé a Laura Ivonne, para decirle que era humanamente imposible llegar hasta Tlanepantla desde el sur sin sufrir daños psicológicos irreversibles, así que quedamos en seguir con el plan original y vernos el domingo.

Ya de regreso yo a mi casa, mientras pensaba en que me gastaba mi dinero para disminuir mi pena, el teléfono: Laura Ivonne, que ya se había desocupado y que era mas factible que tomará el metro y que nos viéramos en tierra neutral en coyoacán. Me sonó muy razonable, y aproveche que en la estación en cuestión hay una tienda de comics para comprarme un comic de SW y el Insider , que hace mucho no compraba.

Al fin llegó, y pues corajes, tráfico y carpinteros de repente no tenían mayor importancia.

Me había dicho que tenía ganas de bailar pero el plan para viernes no podía ser muy ambicioso, ya que debido al trabajo y salud ella no podía desvelarse mucho, así que en un tono mas tranquilo nos fuimos a ver Matrix y luego a cenar.

Anduvimos platicamos, en fin, y después de estar toda la noche interpretando gestos, actitudes y comentarios, sigo sin entender que es lo que quiere de mí. No hubo avance significativo.

Por momentos me arrepiento de haberla invitado al concierto de Pearl Jam con tanta anticipación. Hubiera esperado a mi cumpleaños, a ver si se lo ganaba. Pero en fin…

Llegue a mi casa igual de confundido, hice una entrada breve en el blog y justo antes de irme me encontré a hojuela, reciente amiga del messenger, y platicamos un buen rato, me sirvió.

Sábado: Uts! Que rico es un sábado que puedes dormir hasta que se te pega la gana.

Al levantarme me aventé con mi papá (quien comparte y ha hecho importantes aportaciones a mi teoría del zapping) un partido de Baseball de los Yankees, un documental de la segunda guerra mundial y una película de Mauricio Garcés al mismo tiempo. Después como el hombre es un animal de costumbres (… o de costumbre es un animal) me fui a jugar ccg con la misma pelusa de siempre.

Cuando llegué a Pirámide estaban Charlie, Kike, Skid y Gabo jugando monitos, lo cual medio me caga por que me quedo como chino en lo que acaban. En mi berrinche anti-monitos hasta me compré unos sobres del juego de SW de wizards (que juré nunca comprar) pero como salió expansión de la trilogía clásica, decidí ver que onda, chance y hasta me late. Por ahí llego Otniel y nos aventamos un par de juegos de SW y hasta de Lord. Pasamos pues al Rey del Burguer a cenar y luego a casa’e kike a seguir jugando. Ahí se nos unieron Rick y Alex que llevaba una copia pirata de los cortos de Animatrix. La noche estuvo larga, Juegos de SW, SNL, Animatrix y hasta Rick me enseño a jugar el juego de Wizards y vi, obviamente que aunque no malo, no es mejor que el anterior. Estabamos a punto de irnos, y se nos ocurrió aventarnos un tornein con cartas que traía yo en la cajuela, acabamos como a las 7.

Domingo: Había quedado de ir con Andrés y su esposa y René y su prole a pasear, just for the heck of it. La idea original era que llevara a Laura Ivonne y convivieramos y se fuera acostumbrando a mis amigos. Después del cambalache del viernes, pues ella no iba a ir. Aunque la invité puso un pretexto medio valido, por que alguien semi-cercano había fallecido y no sabía si iba a haber 7 o 9 misas, y a cuantas y cuales debía de ir ella. Quedé de hablarle el sábado para ver si podía o no, pero no le hable porque cuando me lo dijo sonó a pretexto improvisado y no le note mucho entusiasmo. Decidí no hablarle para ahorrarme la negación.

En fin, lo bueno de que no fue es que pude dormir 3 en vez de 2 horas. Llegue con Andrés y ya estaba René y su Fam. Obviamente luego llego el buen Adrián que me ayudó a pasar mas light la tarde entre casados.

El plan por ñero que suene, era ir a Chapultepec a dar la vuelta, al principio medio desconfié pero luego pues me deje llevar y aparte como en Domingo entre menos piense y haga mejor, pues me deje llevar.

Pues resultó un hit, anduvimos en la zona del lago (no donde se rema, sino mas bien por el restaurante), y de lo mas agradable, mucha gente haciendo ejercicio, patinando, paseando perros, dos tres mujeres guapas, aparte el día hasta bonito estaba, muy a gusto.

En particular me latió una zona del lago donde la gente lleva a sus perros les avientan pelotas al agua y los canes contentos se avientan por ellas. La gente y los perros juegan y se huelen los traseros. Me acordé de Odie y lo extrañé mucho.

Después de la vuelta olímpica al lago y unos jugos, que me hicieron cagar morado en la noche, fuimos a casa de Andrés, jugamos Lord y comimos Pizza. Otra buena idea de Domingo para mí.

Durante el transcurso del fin de semana, la pregunta «¿Qué onda para tu cumpleaños?» salió varias veces y cada vez mas e entusiasmaba mas con la idea de Cocoyoc, llegue en la noche a mi casa, le hablé a mi tía y todo indica que el 21 de Junio se arma la comida, ahora solo tengo que mandar la invitación oficial a los convidados.

Luego pude platicar un rato con mi madre, que me platicó de unas amigas de Meche que vinieron de Europa que muy guapas y que la chingada y yo aquí de sope. Le dije que si me hubiera avisado antes de que se fueran hubiera funcionado mejor, pero mal pex. También, que habló con mi papá y quedo en su viaje. Se van a ir mi madre y Verónica un mes a Europa, y mi papá y yo si nos va bien a NY una semanita en verano en compensación. Me da gusto que mi madre se haya decido al fin y que mi jefe no haya hecho mayor berrinche.

Acabé el fin de semana viendo «What Women Want» (Cheil!), pero mientras, pensaba cuán chido sería poder saber lo que piensan las mujeres, aunque fuera por una hora. Me cae que, que útil sería. Aunque dicen que a las mujeres no hay que entenderlas, solo quererlas, ¿Qué hacer cuando no se dejan querer? O peor, ¿Cuando se dejan querer a medias?.

Hoy es lunes, llegue tarde a la Oficina y lo único que he hecho en toda la mañana es escribir este mega post. Buen desahogo.

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