Estoy haciendo un poco de tiempo para decirle al inútil ese, que no es necesario que se presente el lunes. Realmente fue el colmo del abuso y conchudez. El wey no hacía otra cosa que estar todo el día colgado del teléfono haciendo negocios afuera de aqui. Ese realmente no fue el problema, por mi, pudo hacer de su cola un papalote, mientras se pusiera abusado y funcionara estábamos bien. El verdadero problema es que cada vez que le pedía algo, no tenía ni idea de lo que le estaba hablando. Siempre ponía una cara de «De que me esta hablando este wey?» y lo peor es que nunca hizo el mas mínimo intento por tratar de agarrar la onda, y encima la cagaba. Ni como ayudarle Mediocre, conchudo y huevón.
Un día le dí un amigable, «Wey! bajale al teléfono, creo que estas abusando», ni eso entendió.
Poco antes de salir de vacaciones, le decidí dar una segunda llamada, ya mas en serio con plática y todo. Le dije que no me sentía apoyado, que lo sentía distraído y que por eso yo sentía que ni entendía y la cagaba. Que todos sus negocios lo estaban distrayendo y que no podía seguir usando la oficina como centro de operaciones. El wey se indignó, dijo que no se sentía motivado, que el esfuerzo que hacía era proporcional a lo que ganaba y que no iba a dejar de hacer sus negocios.
Por mi, lo hubiera corrido en ese mismo instante, si no fuera por mis vacaciones. Finalmente, quedamos que se iba a quedar hasta fin de mes, suficiente para terminar un poco de trabajo, y aguantar mis vacaciones.
Estoy seguro que lo tenía todo planeado, algo así como «Ah!, pues aqui estoy chido, estoy cerca del centro, tengo mi centro de operaciones, me hago wey. Y en el momento que haya un problema o me llamen la atención pues me voy» Y pues si, se va.
Unos días después, se me acercó y me reclamó que no había sido un buen jefe. Que debí haber sido mas humano, interesarme en sus problemas y apapacharlo. WTF!? Yo sabía que el wey tenía problemas de dinero, nunca le negué un permiso, lo deje hacer tanta puta llamada como quiso hasta que abusó y encima me sale con que necesitaba amor. Eso si fue el pinche colmo.Yo no vengo a ser el papá de nadie, si quieres amor lárgate a un grupo de terapia o cómprate un pinche perro.
de lo que me da mas coraje del asunto, es que antes de contratarlo cuando estaba con el otro asistente, le hablaba a mi jefa religiosamente cada semana pidiendóle trabajo. (El ya había trabajado antes aqui pero por problemas familiares se tuvo que salir, – igual y se le murió el hamster-). En fin, hablaba y hablaba pidiendo una oportunidad, así que cuando corrí al otro wey por peleonero y naco. Mi jefa me enjaretó a este wey. Por mi no lo hubiera llamado, no pasó mi prueba de excel, pero aún así pense «Nadie puede ser tan wey, hay que darle chance», mala desición.
A la hora de la comida, me enteré que todavía el cabrón anduvo pidiendo papelería, que ya no va a usar. Abusando el pilón.
Ya estoy optudimoder, nomás de verlo me pongo de malas. Quería darle cran desde el día que llegué de vacaciones, que todavía hizo otra cagada, pero mi jefa no me dejó. Hoy ella no está, y lo pude haber mandado a la beis desde temprano, solo que escuche que tenía que estar en un lugar a las 6, y nomás por joder no lo he hecho.
En fin es viernes, nada puede salir tan mal.