A mi computadora se le cayó una gomita de la base y cada vez que la uso en un escritorio o una superficie lisa, tengo que ponerle un papelito o algo para que no se mueva como mesa coja.
Al perder mi Mp3 sony, estuve ensayando con la palm y el celular como otras alternativas de música portátil. Pues funcionaron en el corto plazo para viajes en metro y en auto, pero nunca me convencí.
El sábado bastó un poco de sonsaque por parte de mi hermano y me fui a comprar un ipoc.
Después de comprarla, mi hermano no me veía muy entusiasmado. Medité sobre eso, y lo primero que identifiqué fue culpa. Culpa de haber hecho un gasto extra estando tan cerca mis vacaciones, culpa de haber “caído” a comprar un aparatito tan común y popular. culpa de que, a pesar de lo anterior, no compré el mejor, culpa de haberme hecho de algo material para satisfacer una necesidad que no tenía. En fin muchas culpas autoinflingidas, innecesarias e inventadas, igual que muchas necesidades.
Finalmente las culpas se están disipando y estoy disfrutando mucho el aparatito en un plano mas mundano y menos azotado.
El domingo por la mañana salí muy temprano al aeroplátano, para venirme a Mazatlán (¡Ay, mi Mazatlán!).
Tengo algunos amigos que como parte de su trabajo tiene que viajar constantemente y todos coinciden en que al principio es emocionante, pero eventualmente pierde el encanto y a veces, hasta se convierte en algo desagradable
Mi trabajo de oficina lo mas que demanda es que, ocasionalmente viaje a otros edificios del Grupo Financiero, Santa Fe, Polanco, Pedregal, etc. Pero todo dentro de la misma Ciudad de la esperanza En Movimiento. Así que cuando me platicaron que existía la necesidad/ oportunidad de ayudar en una capacitación masiva en muchos puntos de la república me anoté.
Lo bueno, es en si la experiencia, prepararme para hablar frente a un público de algo en lo que no soy experto, (y que me crean), me lo he tomado en serio y me he puesto a estudiar, tomar notas y disimular lo nervioso, (El workaholiqueo de la semana pasada, se lo debo a estos dos días). También valoro la oportunidad de conocer personas y hacer relaciones que en un futuro puedan ser valiosas, y finalmente, que haya sido en Mazatlán definitivamente es un plus.
Lo malo, es que, debido a alguna grilla en la oficina (de la que me creo hasta ahora mas o menos exento), puede no ser bien visto el viajecito y que, por las fechas tuve que forfitear mi boleto para ver Roger Waters. ¡Cheil!
Lo feo, bueno, ese sigo siendo yo.
En fin, ayer me pasé un buen día. Caminé por la playa. Comí camarones al coco (¡uy!). Tomé una siesta frente al mar. Tuve tiempo de leer, y de pensar. Todo con un buen soundtrack, (cortesía de mi ipod nuevo).
Mis impresiones y reflexiones de los detalles me los voy a guardar para otro post, ya que no debo dejar que se olvide el motivo del por que estoy aquí, (creo que vine a trabajar) y tengo que seguir preparándome, aparte, las dos tazas de café de cortesía del cuarto del hotel no me duraron ni medio post y tengo que ir por mi fix.