Hace ya tiempo que me di cuenta que una de mis niñas es la tiendita del piso. Obviamente no me ha dicho nada y nunca he tocado el tema, no tengo problema con ello. A ver si no llega alguna línea institucional al respecto.
No me va a ser posible escaparme una mañana de esta semana para ver asuntos relacionados con el piso y los servicios del departamento, tendré que esperar al sábado y la mudanza probablemente se posponga una semana más. Cheil!
Hace poco menos de un año empecé el extreme makover con el afán de propiciar cambios, sentir como que las cosas se movían, negar la monotonía, cotidianidad y vacío. En cierta medida ha funcionado, ha habido cambios en mi vida, y sin duda ha estado divertido.
Sigue faltando un leit motif.
El impetú del cambio por si mismo, se está yendo. O mas bien, me estoy dando cuenta que lo que sigue sin cambiar soy yo.