El día de hoy, mi madre cumple 70 años. Ella fue muy especifica y nos pidio que de regalo de cumpleaños le escribiéramos una carta. Aquí pongo la mía.
Ciudad de México a 5 de Junio de 2016
Mama:
No podría resumir todo lo que tengo que decir en una sola carta. Necesitaría una enciclopedia entera para poder enumerar tantas cosas que me has dado, todas las maneras en que has influido en mí y el resultado que hemos tenido como familia.
Por ejemplo, uno de los volúmenes de la enciclopedia estaría dedicado placer de servir y atender a mis invitados. Durante toda esta vida, mi marco de referencia en cualquier reunión o fiesta que organice, es la forma en que siempre tratas a quien visita tu casa. Todos los detalles deben estar listos, no debe de faltar nada, todos deben de estar perfectamente atendidos, incluso aunque eso signifique dedicar el mismo tiempo del evento. Me di cuenta que era una proyección tuya cuando observé que en reuniones ajenas esto no era así y que no todos tienen la misma pasión por atender. Yo lo llamo “El síndrome del buen anfitrión”
Otro volumen estaría dedicado a la influencia musical. Aunque los gustos musicales donde coincidimos son muy pocos, mi gusto en general por la música se lo debo a muchos factores donde estuviste presente.
Para empezar en vez de darnos un televisor en el cuarto cuando éramos niños, nos diste un radio. Aunque en ese momento la decisión fue muy impopular, la asociación que tuve desde niño a hacer cosas mientras escucho música vino desde ahí.
La caribe roja, fue otro lugar donde estuvimos expuestos a tus preferencias musicales. A pesar de no estar entre mis favoritos, creo que podría cantar de memoria y regresarme a lugares felices y seguros de la infancia, canciones como: Volverte a ver de Dyango, un millón de amigos de Roberto Carlos, o quiero abrazarte tanto.
En la caribe también descubrí a los Teen Tops y el rocanrol clásico de los 50’s y 60’s, pero creo que nuestro lugar más coincidente es el álbum “Double Fantasy”, específicamente “Starting Over”, que es mi canción favorita de John Lennon.
Los tomos de la enciclopedia serían incontables y no creo que sea humanamente posible llegar a recopilar la totalidad de mis actitudes diarias o detalles en las que estas presente, para bien, regular o mal.
También, estoy seguro que el tiempo que nos quede juntos se escribirán muchos más volúmenes y no solo en mi enciclopedia, sino en la mis hermanos, tus nietos, y la cantidad de personas que hemos tenido la fortuna de encontrarte en el camino.
Felices 70.
Mau