Los dos tipos de post clásicos decembrinos, son el navideño y el retrospectivo al año que se acaba. Este post tiene la intención de ser uno navideño.
La primera mitad del mes ha tenido sus respectivas comidas y celebraciones findeañeras. Los proveedores ya han mandado algunos regalos y el Sr del Banco también se puso guapo.
Hoy tendremos el Oompa-loompa Christmas Special en un hotel muy nais de Reforma y espero no romper mi racha de invicto en ganarme algo en la rifa.
El viaje a NY, se comió mi presupuesto navideño, así que este año no hay mucho presupuesto para regalos. 🙁
Los recursos que quedaron se concentraron en regalos para mis sobrinos. Me encanta comprar juguetes.
Este fin de semana la idea es darme un encerrón Chino, que aunque suene sucio, solo es ponerme a estudiar para mi examen del lunes.
Aún estoy en duda si continuar el próximo año con el idioma. Veremos.
Tampoco voy a tomar vacaciones este fin de año, y por si no fuera lo suficientemente pinche, el calendario se rie de nosotros los asalariados coincidiendo los días festivos en sábado y domingo.
Ojalá que por ser navidad al menos nos perdonen la hora nacional.
El lunes pasado llevamos a mi papá a comer para celebrar sus 70 años.
Debería de dejar de angustiarme por cosas que no tienen remedio, como el paso del tiempo, pero soy preocupón crónico.
Nos la pasamos bien a pesar de todo. Comimos rico.
Todavía no he ido a ver la iluminación al centro. Me gusta ese paseo. La siguiente semana por la tarde será un propósito.
¡Mucha suerte con tu encerrón chino!… con el examen pues.