Durante esta semana la empresa donde trabajo tuvo a bien organizar «Brigadas de Salud», que es un plan para diagnosticar el estado de salud promedio de todos los empleados y de paso saber como esta funcionando el cuerpo de cada quien.
Pues me presenté en la fecha y hora señalada, me midieron, me pesaron, me miraron el diente, me pincharon un dedo y me hicieron mear en una tirita de papel.
Todo eso para decirme que estoy muy gordo.

En fin, decidí dejarme de hacerme wey e hice una cita con un Dr. que me recomendaron para bajar la lonja. No estoy seguro de como me siento.

Durante la cita el Dr. habló y habló y habló. Se aventó un speech que evidentemente tiene preparado y mas que ensayado, parecía un informecial humano. Hablaba, se contestaba solo y su asistente parecía edecan de mago acercándole y retírandole el material.
Finalmente, la mayor parte de lo que me dijo ya lo sabía. Que si los carbohidratos, las calorías, que si las grasas, en fin. Me dió una listita de alimentos y me vendió placebos. Cheil!

Nunca he estado convencido en los métodos alternativos para adelgazar, acupuntura, anfetaminas, homeopatía, etc. Creo que la única forma efectiva es el DDT (Dejar de tragar). Claro que si mezclas una buena alimentación con cualquiera de los métodos acabas bajando de peso.

La decisión es lo único infalible. Mi problema es que llevo mucho tiempo sin poder decidirme.

Escuchando el infomercial del Dr., aparte de la reacción Pavloviana de buscar el control remoto para cambiarle de canal, me puse a pensar «Si todo ésto ya lo sé, ¿por que no lo he hecho?». Buena Pregunta. Aun no estoy seguro de la respuesta.

Decidí empezar el tratamiento, con todo y placebos. Probablemente la parte de la alimentación sea suficiente, pero le voy a dar chance al show completo, (previa googleada e investigación de lo que me estoy tomando). Lo peor que puede pasar es que baje de peso.

Aunque no puedo evitar, cada que me tomo las gotitas o las pastillitas sentir como si estuviera comprando piratería en el metro, mandando SPAM, arreglando mi casa segun el Feng Shui, o dando mordida al de tránsito, como si estuviera traicionando lo que creo.