Ayer por la tarde huyendo del anunciado tráfico del centro de la ciudad, mi jefa y yo organizamos una junta en la zona Sur.
El hombre que fuimos a ver me cae muy bien, ha de estar en sus 40’s, es muy amable y creo que estamos trabajando bien.
En un momento de la junta nos habló muy de una chica que le estaba apoyando y mas adelante la llamó y nos la presentó, no estaba fea pero tampoco espectacular, bastante estándar.
Mientras nos la presentaba él tenía una mano en su hombro con un grip medio cariñoso y mientras la tenía ahí le retiró el pelo que le tapaba la cara. Se me hizo algo raro para una relación estrictamente Jefe ? Empleada, pero no le di mucha importancia y hasta pensé: «Nah! De cuando a acá soy tan observador…».
Mas adelante en la junta, el señor por alguna razón no recordaba su propio número de celular, a lo que ella se lo dio de una forma sospechosamente natural y sin esfuerzo.
Yo no soy tan perceptivo, lo que quiere decir que deberían ser más discretos.
En Fin, a mi que me importa. Ha de ser envidia, siempre lo he querido hacer en el cuarto de la copiadora.
jajaja! Pos que fisgón oye!!!aunque creo entender que obviarón demasiado las cosas…!! en fin esta es una prubea más de qué no solo nosotras nos enróscamos…;)
Saludos
Aparte de las tiras de Trino necesite de unos alcoholes, pero si se me olvido casi todo…a ver si te posteas algunas tiras de las crónicas marcianas…
?en cuanto a lo del cuarto de la copiadora?el riesgo de que te quedes estéril y que en las fotocopias salga algún vello púbico es grande…así que cuidado
salu2