Los dos días pasados estuve en un curso organizado por el grupo financiero para el cual trabajo.

El tema de los dos días de capacitación fue la sensibilización del personal hacia la Calidad en el Servicio, y cómo ésta debe ser lo que ayude al banco a tener el 20% del negocio para el 2006.

Este es un tema en el cual yo creo. La Calidad, el hacer cosas como deben de ser y en un descuido hasta un poco mejor.

Después de una especialización y de algunos cursos en la matera, de lo que se habló en esos días fue básicamente lo mismo que ya he visto, solo que con un instructor cuyo trabajo era motivar al personal y vender la idea. Yo ya hace tiempo la compre.

De regreso mientras venía en el metro (con mucho tiempo para pensar) venía meditando en el tema y recordando con orgullo situaciones laborales donde el hacer «ese» detalle extra, o tener soluciones antes de que lleguen los problemas me han traído reconocimiento y satisfacciones. Y pensando en que, si sigo por este camino, preparándome y haciendo las cosas bien, no puede mas que irme cada vez mejor en mi trabajo, cualquiera que este sea.

Luego empecé a hacer una comparación con mi vida no-laboral. Y me cayó un veinte. ¿Por qué no veo una tendencia igual de clara en la otra parte de mi vida? No siento que el camino que llevo me deje igual número de satisfacciones. Estoy dejando mucho al azar personalmente y eso me preocupa.

Se que al tener éxito en mi trabajo de seguro ganaré mas dinero, tendré mas seguridad, alguna que otra satisfacción y voy a cubrir varias de las necesidades de las que el tal Maslow hablaba. Pero algo falta…

Ando muy despreocupado por la vida, como alguna vez me lo dijeron. Y creía que hasta ahora me había funcionado, ya no estoy tan seguro. Tengo fe en que en algún momento voy a tener alguna especie de breaktrough emocional y éste va a decidir el rumbo.

A lo mejor así es el asunto, ya no sé. Probablemente, una vez mas este pensando demasiado cuando lo que se necesita es sentir. A veces me gustaría sacarme un clon y platicar con el derecho, a ver que tanto traigo adentro.

En fin, feliz año nuevo chino!

Ayer por la mañana fue el bautizo de mi sobrina Ana Paula. No fue nada grande, la bautizaron en serie junto con otros 7 u 8 criaturas y después de eso, los familiares cercanos y padrinos nos fuimos a comer comida italiana.

En general estuvo bien, pero la gripa estuvo muy jodona. Hasta consideré no ir a la Boda de Mayté y Lalo. Pero un Afrinex y una siestita me cambiaron de humor y me fui a la boda.

Entre que iba solo y que no podía tomar alcohol por estar tomando medicina, decidí mentalizarme para tratar de agarrar un «Natural High» y divertirme lo mas que se pudiera.

La misa estuvo corta. Por cierto tiene mucho tiempo que no voy a una boda donde se arroje arroz, ya nadie avienta arroz, parece que ya no esta de moda y/o no es políticamente correcto. En algunas bodas al parecer se usan las burbujitas de jabón y en otras, como la de Mayté y Lalo, nos dieron a todos campanitas para que las sonáramos. No se cual haya sido el efecto intencionado, pero la iglesia sonaba como asamblea de sindicato de carritos neveros. Pero bueno.

Tan pronto salimos de la misa yo ya traía en mi cabeza el checklist de música de boda a oír, en particular el sonsonete inicial de ?La vida es un carnaval de Celia Cruz?, que, como en cualquier boda que se respete se toca ¿no?. Pues no, en esta boda no se tocó a Celia y me hizo quedar mal como conocedor de formatos de bodas.

Pero fue realmente la única excepción, ya que se tocaron cosas como, la Disco Samba, YMCA, Caballo Dorado, Rock en español de los 80?s y como toque especial una selección de cumbias baruleras que de ser recopiladas en algún disco éste se debería llamar: «Cumbias para cerrar la calle» o algo así. La selección incluía la canción de la Antena Parabólica, lo que resarció no tocar el Carnaval de Celia.

Pero bueno, pasó el baile de los novios, el brindis, las fotos, la cena y demás protocolo y empezó el bailongo. (Word sí reconoce la palabra bailongo!), al principio hubo un momento bastante incomodo cuando todos mis amigos en la mesa salieron a bailar junto con sus parejas y me quedé como el chino en la mesa. Cheil! Decidí que aunque sea tengo que conseguirme una pareja de baile, para alguna emergencia de esas. Pero bueno, después de las primeras piezas ya se fueron alternando y a petición del público pude bailar con todas las parejas de mis amigos, lo cual resultó ser lo mas interesante de la noche.

Cabe mencionar como precedente, que en realidad no soy un gran bailarin. En realidad me sé como tres pasos, que siempre repito, pero me divierte mucho.

Primero bailé con Isela, la novia de Alonso. Que realmente fue X, ya que casi luego luego pusieron música Disco con Can’t Take my Eyes off you (que para mi gusto fue muy temprano en la fiesta), seguida de la rueda a-la-griego, que todos conocen, por lo que no hubo demasiado chance de bailar en pareja.

Al deshacerse la rueda, me vi bailando con Bety, la esposa de Hector (quien no baila ni los ojos). Bety llenita y simpática, y como yo, con la mejor disposición para divertirse, resultó ser una con las que mejor me entendí.

Poco después saqué a Andrea la novia de Mario a bailar un ritmo mas salsero. Este si fue un momento difícil, ya que Andrea a eso se dedica, es bailarina de Flamenco o algo por el estilo. Así que aquí hubo que haber mayor concentración en el movimiento de pies y hacer lo posible por que el baile fuera lo mas serio posible.

Dejé de bailar con Andrea cuando pusieron música con instrucciones, y en el camino a la mesa fui interceptado por Norma, la esposa de Miguel.

La música con instrucciones, generalmente no es muy difícil de bailar, el grupo siempre te dice que es lo que hay que hacer seguido. Que manos para arriba, la vueltecita, de reversa mami, follow the dealer dealer, en fin, nivel uno de dificultad que con el mínimo esfuerzo cualquiera puede seguir el ritmo.

Falso

Norma resultó pariente cercana de la arritmia, y pues ni las instrucciones mas claras ayudaban. Pero al parecer, no le importaba demasiado y se movía y retorcía como tlaconete y al parecer se divertía mucho. (Igual que yo)

Un poco mas tarde, Susana, la novia de Eligio me pidió que bailara con ella. Al llegar a la pista, el horor. Empezó el Rock ‘n Roll, ritmo al que siempre le he tenido respeto, que para mi es de segundo grado de dificultad y que me declaro oficialmente incapacitado para bailar, al menos con gracia y sin bajas.

Aguanté bailando y haciéndome wey un par de piezas, hasta que providencialmente cambiaron el ritmo a música en español de los 80’s.

Cerca de nosotros estaban un par de niñas de 10 – 12 años, que se la pasaron baile y baile y fue bastante interesante ver como cada cambio de canción se hacían caras la una a la otra, como tratando de reconocerla hasta que al llegar el coro les caía el veinte. Mientras que del otro lado estaba ya un grupo mas baquetón, obviamente de la generación, que se las sabía completitas y las identificaba desde el primer acorde.

Así que volteaba a un lado veía un intento de tarareo, volteaba para el otro y veía lipsync y cuando volteaba al frente a ver a Susana, no se que veía. No se que edad tenga, pero me dejó en shock que le costaba trabajo identificar canciones como Tu y yo somos uno mismo o Nene Nene que vas a ser cuando seas grande. (Que es imposible negar que toda una generación se las sabe de memoria aunque lo niegue).

Finalmente al son de la Santanera y otros cha cha chas, bailé con la otra Susana, esposa de Jorge. Aquí fue un poco mas relajado ya que decidimos tratar de imitar a la pareja que aparentaba mayor edad de la pista, para no regarla. Obviamente la regamos, pero estuvo a gusto.

Justo cuando ya estaba encarrerado y listo para la segunda vuelta, se acabó la fiesta :(. Pero me la pasé tan bien, que hasta la gripa se me olvido y si consideramos el hecho que lo único que bebí en toda la noche fue agua. Creo que estuvo bastante bien.

Ah! como me gustan las bodas.

¿Quién dice que no duelen las huellas en la arena?

Pues de una vez que estoy en la oficina a estas horas de viernes y sin prisa de irme, voy a escribir un post y así no romper mi record de al menos un post diario esta semana.

Sigo con gripa. Estoy en la fase de que cada vez que me sueno la nariz se me tapan/destapan los oídos, es bastante molesto.

Tenía la idea de que hoy era el concierto de Kravitz y me hubiera sido muy incomodo ir enfermo. Pero resulta que sí estoy atarantado, por que después de alarmar a Rosa, me puse a investigar y averigüe que es hasta el 4 de marzo, menos mal, así hoy me guardo e igual me curo. (Ya hasta me compré Penicilina vigente!)

Mañana es el Bautizo de Ana Paula, mi sobrina, y por la noche se casan Mayté y Lalo, muy queridos amigos. No se qué servicio de bodas contrataron pero me estuvieron hablando para que confirmara, «Hola Hablamos de Banquetes nosequechingados para confirmar su presencia en la Boda de Mayté y Lalo» Así como 3 veces. La última vez, ya se me había pasado la emoción. Con ganas de contestar ?mmmh, no sé… ¿qué otras bodas tiene?…»

El domingo es el Superbowl, al cual he decidido mantenerme neutro y ecuánime. No apostaré este año. Igual no creo llegar a casa del Sonrics. Mis amigos del HJC discurrieron verse el domingo para planear algunos negocios para este año. Me caga que la mayoría sea sport impaired. El año pasado discurrieron hacer junta en la final de verano del Futbol. Cheil!. Pero saque buena lana y me la pasé muy bien.

En fin, I’m outta here…

De algunos años para acá, por estas fechas me agarran unas gripas méndigas. La tradición de ver año con año el Superbowl en casa del Sonric?s generalmente va acompañada con la tradición de que llegue enfermo, o no llegue.

El Martes por la mañana mi hermano me dijo: «Que raro, ya va ser el Superbowl y no te has enfermado». …y como si fueran palabras de una maldición antigua. Zas! Anoche me dio fiebre, pase una pésima noche, en delirum tremens, nefasto. Hoy me siento bastante disminuido, atarantado, moquiento y con el cuerpo cortado. Odio Febrero. Soy alérgico a Febrero.

Hoy en la mañana tuve una reunión con gente importante dónde se apreció mi trabajo, se sintió bien. El resto del día me la he pasado haciendo cosas de contadores. También odio la contabilidad.

Me di cuenta que la penicilina que me tomé estaba caduca y en un movimiento brusco tiré mi vaso de agua y me mojé el saco y un calcetín.

Algo esta mal con este día en general…

Por cierto, gracias a aquellos que mandaron felicitaciones por el aniversario de este su Blog. Se agradece la lectura y los comentarios. Un abrazo.

Sigan Gozando!

Ayer mi asistente hizo la heroica de no ir a trabajar y no llamar ni para avisar. Sobra decir que me dio mucho coraje, mas que por la falta por naco.

Hoy antes de que me empezara a explicar («No, Mau, es que me metí en un pedote…»), lo detuve en seco antes de que me contara el temboruco, le dije que no quería ni saber la causa del por que había faltado, y que estaba realmente decepcionado por su falta de educación y responsabilidad. ¿Cómo es posible que me localice en Sonora, y no sea para agarrar un telefono y avisar que no va a ir a trabajar por cualquier cosa?.

En fin hice lo que tenía que hacer, lo corrí, lo despedí, de di cran al alacrán, lo puse de patitas en la calle, lo bote, lo despaché, le di las gracias por participar.

La decisión no fue fácil, yo quería esperarme a tener la ayuda extra que me prometieron, antes de correrlo, si no me iba a quedar como la torta de los dos perros. Así que le pedí consejo a mi jefa quien dijo que me apoyaba totalmente, pero las cosas tienen que ser en caliente, nada de «¿Te acuerdas hace 6 meses que faltaste y como las chachas no avistaste…?». Así que me decidí y lo hice hoy.

Lo pensé mucho todo el día. No es fácil sentarte de frente a otro y decirle que ya no va a tener chamba. Pero así como me entraban los nervios, me ponía a pensar que era el o yo. A fin de cuentas, nunca iba a lucir mucho mi trabajo, sin un apoyo real, un poquito responsable y otro tantito pensante. Ni hablar.

Traté de ponerme en su lugar para saber que decir. Pero nunca me han corrido de un trabajo y no se que es lo que alguien en esa posición quisiera escuchar.

Como media hora antes de salir lo cité, y le dije. «Vamos a prescindir de ti…».

Le dije la introducción de lo que tenía pensado y él ni las uñas metió. No fue necesario utilizar argumentos de mas peso. No dijo nada, creo que se le escapó un «Esta bien mi Mau, no te preocupes»

Cheil!

En fin, el protocolo dice que trabaja hasta el día 15, entrega todo bien y se le paga su liquidación completa y todo lo que marca la ley. Justo y civilizado.

Ahora lo que procede es conseguir un suplente al grito de zas! Por que si no en 15 días ya me veo quedándome a dormir en la oficina. Y además, tampoco espero que estos 15 días reciba mucho apoyo de su parte, si de por si era irresponsable, ahora con menos que perder, no me quiero imaginar.

En fin, fue mi primera vez, y espero no tener que hacerlo mucho durante mi vida profesional, no es agradable.

Necesito un Chicle…

Hoy llegué a la oficina y viendo tanto trabajo que tengo que hacer, decidí priorizarlo y empezar por lo mas importante. Así que me fui a servir un café y me dispongo a escribir un post.

El viernes salí con Rosa al centro. Entre que ella sale a medio día y viene desde lejos y que me queda cerca el centro de mi trabajo, no es la primera vez que andamos por esos rumbos.

Primero fuimos al Bar La Opera a ver el balazo de Pancho Villa, tomar una cerveza, comer una botana y platicar de temas varios (en ese orden).

Estabamos tomando camino hacia el sur cuando una mala vuelta nos hizo salir al zócalo donde había uno de esos conciertos populares que organiza el GDF. Al ver y escuchar mas de cerca nos enteramos que quien estaba tocando era nada menos que la Internacional Sonora Santanera. Decidimos que no podíamos dejar pasar la oportunidad y nos detuvimos a escuchar clásicos como: El mómboro (quiñá, quiñá), Luces de Nueva York (aka Fue en un Cabaret), Perfume de Gardenias y por supuesto La Boa (ah! que bueno que la ensayan).

Durante el recital nos enteramos que el concierto era en beneficio de los damnificados en Asia y que la pachanga seguía por esa noche y por el siguiente día con grupos varios.

Después de la Internacional Sonora Santanera, vino el grupo de merengue conocido como Merenglass que toco ritmos como: El baile del Oso (que es el que generalmente hago yo cuando bailo), el baile del Hoyo y su nuevo y actual sencillo: El Baile del Peje. En seguida vino otro grupo de música tropical bastante barulero y decidimos dar por buena la noche ya que Rosa tenía mucho tramo que recorrer.

Ahí hubiera sido un buen cierre de viernes.

Por cierto, estas son las fechas en que este Blog cumple 2 años de aparecer. Alzo mi mano y mi taza de café y brindo por ello.